Blog
Prótesis dentales
06/10/2016
Las prótesis dentales sustituyen a los dientes naturales perdidos. El especialista en prótesis dentales diseña las nuevas piezas con resinas y/o cerámicas evaluando siempre la estética (mediante un detallado diseño de la sonrisa) y la funcionalidad (estableciendo una dimensión vertical y oclusión correctas).
Actualmente disponemos de varios tipos de prótesis dentales dependiendo del sistema de retención: diente natural o implante dental. Y, en función de las necesidades del paciente, estas prótesis pueden ser fijas o removibles.
Prótesis fija
Es la opción más cómoda para el paciente, ya sea sobre el diente natural o sobre implantes, porque al ser fijo el paciente llega a sentirlo como una dentadura propia.
Su función, aparte de sustituir piezas ausentes, es la de reconstruir dientes que necesitan restauraciones importante, ya sea por caries o por desgaste muy avanzado debido a otras agresiones como ácidos, bruxismo…
Existen numerosas opciones, desde las coronas convencionales de metal-porcelana, a los materiales más actuales como el circonio, disilicado de litio y coronas totalmente cerámicas; siendo estas últimas las más estéticas.
Prótesis removible
Como bien dice su nombre, el paciente puede quitarse la prótesis para limpiarla correctamente y volvérsela a colocar.
Permiten restaurar la función masticatoria del paciente con total normalidad en función del sistema de retención.
La prótesis completa o parcial removible se apoya en la mucosa del paciente y en los dientes adyacentes, si existen Este tipo de prótesis puede tener algún tipo de inestabilidad aunque, en función de los dientes remanentes y del tipo de anatomía maxilar del paciente, se pueden obtener resultados muy satisfactorios.
Las sobredentaduras son mucosportadas pero a la vez implantoretenidas. Así, con un número adecuado de implantes en función del tipo de arcada, se obtiene una retención muy estable de la prótesis, solucionando la inestabilidad que pueden tener las prótesis removibles convencionales.